Pedro Fernández Arcila, concejal de Sí se puede en el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, ha mostrado su sorpresa por el hecho de que el grupo de gobierno siga sin responder a una pregunta por escrito al alcalde en la que el edil se interesó, hace un mes, por las circunstancias en que fue adquirida la casa Siliuto en el año 2002.
La corporación adquirió la casa Siliuto, en el barrio de El Toscal, por un importe de 612.777 euros, cuando los técnicos de la Gerencia Municipal de Urbanismo la habían valorado en 332.496, poco más de la mitad, en lo que parece ser una política de despilfarro y mala gestión del dinero público desarrollada en anteriores mandatos y que se repitió con la compra del frente de Las Teresitas. Arcila considera llamativo que se justifique este pago argumentando que el precio pactado guarda la debida proporción o razonabilidad, cuando se adquirió por una diferencia abrumadora.
Además de esta irregularidad, el portavoz de Sí se puede en el Ayuntamiento denunció que el inmueble no se ha destinado a Casa Insular de la Juventud, motivo por el que se compró con la intención de ser cedido al Cabildo de Tenerife. Arcila afirma que “llevamos esperando casi diez años para que el Ayuntamiento cree la primera Casa de la Juventud en el municipio. Lamentablemente, hasta la fecha la nueva corporación no ha dado ningún paso para cambiar esta situación”.
El edificio permanece en un estado lamentable de abandono, a pesar de tratarse de un inmueble catalogado de protección integral.