Concepción Pérez, portavoz de Sí se puede en el barrio de La Salud de Santa Cruz de Tenerife, denunció esta mañana que el talud que en la tarde de ayer se deslizó en la calle Guanche Zebenzuí lleva al menos cinco años sin muro de contención, una circunstancia que tanto el alcalde del municipio, José Manuel Bermúdez, como el concejal de Servicios, Dámaso Arteaga, conocen de primera mano, pues el año pasado hicieron una visita a pie por el barrio y los vecinos les explicaron los peligros del solar donde se produjo el derrumbamiento.
Pérez indicó que hasta hace siete años el solar era una huerta que disponía de un muro de contención, lo que impidió que fenómenos como la riada del 31 de marzo de 2002 afectaran al talud. Sin embargo, cuando una empresa comenzó las obras para la construcción de un edificio, hace aproximadamente cinco años, destruyó esa estructura. Posteriormente el proyecto quedó paralizado y desde entonces el talud, de una profundidad considerable, no dispone de un sistema de contención. Las fuertes lluvias del pasado fin de semana han sido suficientes para desplazar una gran roca, lo que, a su juicio, fue el origen del deslizamiento que se produjo ayer.
La representante de Sí se puede dijo que los vecinos llevan años denunciando esta situación, de la que tiene plena constancia la Gerencia de Urbanismo, a pesar de lo cual hasta el día de ayer no había tomado cartas en el asunto. De hecho, la única actuación del Ayuntamiento había sido cerrar la zona colindante al talud con vallas de zinc, una medida que en absoluto garantiza la seguridad de las personas.
Pérez cree imprescindible actuar con carácter de urgencia para proteger a los ciudadanos, dado que existe un claro riesgo, como se demostró ayer, de que parte o la totalidad de la vía sufran un deslizamiento. Sí se puede se suma así a las denuncias de los vecinos ante el riesgo al que se han visto expuestos durante estos años, pues la calle es transitada a diario por peatones, algunos de los cuales habían pasado ayer mismo por el tramo del talud pocos minutos antes del derrumbamiento.