Alberto Bolaños, vocal de Sí se puede en el Distrito Centro-Ifara de Santa Cruz de Tenerife, ha denunciado el peligro que supone para los peatones una obra en la avenida Ángel Guimerá, con una estructura de soporte de una fachada que ocupa la acera y obliga a los viandantes a transitar por el carril ascendente del tranvía.
Se da la circunstancia de que en la obra hay un cartel en el que se advierte del peligro de atropello y se señala la obligatoriedad de cruzar a la acera contraria; sin embargo, este cartel está situado justo al comienzo de la zona vallada, y no en el paso de peatones más cercano, con lo que se obliga a retroceder o bien a seguir transitando sobre las vías del tren, con el consiguiente riesgo para los peatones. Además, algunos ciudadanos han señalado a Bolaños que al paso del tranvía la estructura que protege la fachada se mueve, lo que podría ser un peligro añadido.
Sí se puede llevará este asunto a la Comisión de Control del próximo mes de julio, en la que, además, pedirá información sobre la obra, que ha supuesto la demolición de una vivienda cuya fachada –contigua a la que ahora impide el paso por la acera– se encontraba protegida dentro del área del Bien de Interés Cultural (BIC) del Monumento del Teatro Guimerá.
Pedro Fernández Arcila, concejal de Sí se puede en el consistorio de Santa Cruz, ya había pedido hace ahora un año información exhaustiva sobre la licencia concedida por el Ayuntamiento para esta obra, licencia que, según el edil, “infringe a todas luces lo previsto en el decreto de creación del Bien de Interés Cultural”. Arcila mostró entonces su preocupación por la licencia de edificación, “vista la manera claramente ilegal con la que han resuelto la demolición de esta fachada protegida”.
En la Comisión de Control de julio, Sí se puede recordará al grupo de gobierno dos sentencias del Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) sobre la demolición de varias viviendas en el barrio de El Toscal. Una de estas resoluciones anuló el proyecto de demolición de un edificio catalogado, y la otra, la posterior autorización del proyecto de edificación emitido por el Consejo Insular de Patrimonio Histórico.
En este sentido, la organización ecosocialista no descarta emprender acciones judiciales en relación con la demolición de la fachada de la vivienda de la avenida Ángel Guimerá si el Ayuntamiento no actúa conforme a la ley.