Asunción Frías, concejala de Sí se puede en el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, y Juan Daniel Marrero, coordinador territorial de la organización en el municipio, trabajan en la elaboración de una moción en la que se pedirá al pleno de la corporación la participación ciudadana en la elaboración de los presupuestos.
El partido critica que no se haya iniciado el proceso participativo en las cuentas de 2012, que serán debatidas próximamente, y considera imprescindible que en la elaboración de los presupuestos de 2013 comience a implantarse este sistema, que ya se usa en varias ciudades españolas, europeas y latinoamericanas y por el cual los vecinos y vecinas pueden decidir directamente en qué quieren invertir el dinero.
Para la elaboración de la moción, que será presentada en los primeros meses de 2012, Sí se puede trabaja con colectivos y asociaciones de todo el municipio. La propuesta, con la que se pretende iniciar un proceso previo de sensibilización y formación entre vecinos y personal político y técnico de la administración local, será llevada también a los tagorores para su debate y mejora. En este sentido, Sí se puede considera que estos consejos de distrito deben convertirse en auténticos espacios de participación, una circunstancia que actualmente no se da.
La moción contempla que los presupuestos participativos se implanten progresivamente, comenzando el primer año por las partidas específicas que hay para cada distrito e incorporando cada ejercicio más partidas y a más sectores ciudadanos en la toma de decisiones hasta que después de un largo proceso, que en otros lugares ha sido aproximadamente de una década, se llegue a implicar al 100% de los presupuestos y a la inmensa mayoría de la población.
Sí se puede recuerda que este no es el primer intento de impulsar los presupuestos participativos en la ciudad: en el pleno de diciembre de 2003, el entonces concejal de Economía y Hacienda, Guillermo Núñez, se comprometió a implicar a los movimientos sociales. Durante ese mismo mandato se celebraron reuniones y cursos con colectivos vecinales y se crearon comisiones de trabajo en los tagorores, pero han pasado ocho años “y todo aquello quedó en agua de borrajas”, según Asunción Frías.
“Esta vez pedimos que el grupo de gobierno se comprometa seriamente para que esta iniciativa se lleve a cabo con éxito –añade Frías–, pues las asociaciones vecinales y otros colectivos ciudadanos ya están cansados de que primero se les invite a opinar y después no se tengan en cuenta sus propuestas a la hora de tomar decisiones”.