Sí se puede urge al grupo de gobierno del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife a que estudie las medidas oportunas para comenzar a cobrar el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) por determinadas propiedades de la Iglesia católica y de otras confesiones religiosas y colectivos que actualmente no tributan a pesar de que deberían hacerlo. La organización considera que la Ley de Mecenazgo y los Acuerdos con la Santa Sede no impiden que aquellos inmuebles no destinados al culto o a fines sociales estén sometidos a este impuesto.
Asunción Frías, concejala de Sí se puede en el Ayuntamiento de Santa Cruz, recuerda que el edil de Hacienda, Alberto Bernabé, dijo hace dos meses en un medio de comunicación que la corporación estaba estudiando esta posibilidad. Sin embargo, pasados dos meses no existe constancia de que se haya avanzado en este sentido. Por todo ello, Frías preguntará en la próxima Comisión de Control, que se celebrará el día 12, qué medidas se han tomado para estudiar la posibilidad de cobrar el IBI y otros impuestos o tasas a las diferentes confesiones religiosas o a otras organizaciones que poseen inmuebles que, no estando dedicados al culto ni a fines de interés social, tampoco están pagando tributos municipales.
Sí se puede también quiere saber qué pasos ha dado la Concejalía de Hacienda para elaborar un inventario de las propiedades de la Iglesia en el municipio. Este listado se hace necesario por cuanto el propio Bernabé reconoció, en las citadas declaraciones, que el Ayuntamiento ni siquiera conoce qué bienes tiene la Iglesia en Santa Cruz, ya que nunca le ha cobrado el IBI ni ninguna otra tasa.
El cobro de IBI a la Iglesia católica y a otros colectivos religiosos es una medida que se enmarca en la legalidad y que ya se ha comenzado a aplicar en algunas capitales del Estado, como Zamora, Salamanca y Palencia. En Tenerife, el único Ayuntamiento que ha solicitado formalmente al Consorcio de Tributos que grave estas propiedades es el de Buenavista del Norte, donde gobierna Sí se puede.
En relación con las opiniones vertidas por un representante de la Iglesia en Tenerife en el sentido de que medidas como esta llevarían implícito cobrar igualmente a otros colectivos, como Cruz Roja, Frías señala que “a aquellos locales pertenecientes a cualquier confesión religiosa que estén dedicados a fines de interés social se les debe dar el mismo trato que a Cruz Roja o a otras ONG, pero la Iglesia católica tiene muchas propiedades que no están teniendo un uso social ni de culto, que están utilizándose con fines lucrativos o, simplemente, están abandonadas”.
“No hay ningún artículo de la ley –añade la concejala– que las exima de pagar tributos, por lo que se les debe dar el mismo trato que a cualquier propiedad privada y exigirles que paguen el IBI, la basura y otras tasas”.