Sí se puede impulsa una declaración institucional del pleno del Ayuntamiento de Candelaria en defensa de la piscina municipal. Durante la sesión plenaria del pasado 29 de julio, la portavoz de la organización, Lourdes Mondéjar, promovió un acuerdo al que se sumó de manera unánime toda la corporación, según el cual el Ayuntamiento se dirigirá a la Dirección General de Sostenibilidad de la Costa y del Mar del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico para instarla a que resuelva favorablemente la concesión administrativa de la gestión de este servicio al Ayuntamiento de Candelaria.
La iniciativa para alcanzar un consenso sobre el asunto se inició en la Comisión Informativa previa al pleno, donde Sí se puede logró parte de los objetivos que perseguía con la presentación de una moción, al obtener la información necesaria y el compromiso del gobierno municipal para eliminar la falta de transparencia que pesaba sobre el caso y saberse que no existen impedimentos legales ni otros motivos pendientes de resolver más allá de insistir ante el Ministerio para recuperar la gestión del servicio.
“Además, en la Comisión Informativa entendimos que la diferencia entre el valor del canon establecido por Costas –de 62.350,40 euros anuales– y el propuesto por el Ayuntamiento en mayo de 2020 –de 39.413 euros– no es motivo para la no resolución del expediente, puesto que el Ayuntamiento estaría dispuesto a satisfacer la cantidad impuesta por esa Dirección General”, explica Mondéjar. Dado que el otro objetivo de la moción presentada por Sí se puede era conseguir que el Ayuntamiento aceptara el canon de Costas, su grupo retiró e acuerdo inicial y lo sustituyó por el que finalmente fue aprobado como declaración institucional.
A juicio de Sí se puede, el de la piscina municipal es “un servicio público esencial que esperamos volver a disfrutar, aunque planea un temor fundado, dados los antecedentes de lo ocurrido en Los Silos, donde la corporación dejó también caducar la concesión del servicio y ahora están a punto de perder la piscina, dado que Costas no renovó la concesión y proyecta su demolición. Dejar que una concesión de Costas caduque y no poner la diligencia debida en renovarla puede tener consecuencias nefastas”, advierte la concejala.
Mondéjar recalca la línea defendida por su organización respecto a la importancia de “mantener un diálogo urgente y permanente con Costas para alcanzar un acuerdo sobre este asunto”, toda vez que el municipio no cuenta, ni puede contar, previsiblemente, con instalaciones alternativas a corto o medio plazo y que este es el segundo verano en el que las niñas y niños de Candelaria no disponen de los cursos de natación habituales. “A los vecinos y vecinas de Candelaria nos urge que se restablezca cuanto antes este servicio público, suspendido desde diciembre de 2019, dado que la piscina siempre se ha abierto desde marzo, con programas específicos de natación libre, cursos de mantenimiento, para mujeres embazadas, de natación terapéutica, de iniciación y de socorrismo”, apunta.