Sí se puede en Los Realejos rechaza el PGO porque repite fórmulas caducas basadas en la especulación del suelo
El Comité Local de Sí se puede en Los Realejos, recientemente constituido a partir de la reestructuración del Comité Comarcal del Valle de la Orotava, rechaza categóricamente el Plan General de Ordenación (PGO) aprobado de forma inicial, en virtud de la mayoría absoluta del Partido Popular, porque repite fórmulas caducas basadas en la pura y dura especulación del suelo.
Por ello, Sí se puede anima a la ciudadanía a aprovechar que el PGO se encuentra en fase de alegaciones, para mostrar su rechazo al documento, dado que su aprobación definitiva en los términos previstos, “hipotecaría gravemente el futuro del municipio de Los Realejos en las próximas décadas”.
Para el portavoz del Sí se puede en Los Realejos, Damián Marrero, “el despropósito más evidente del PGO es la catalogación de la emblemática zona agrícola de Los Príncipes como suelo urbanizable residencial, en la trasera de la Hacienda, y de urbanizable terciario en la gran extensión de suelo al norte de ésta”. En este sentido, detalla que uno de los usos pretendidos, el de campo de golf, reproduce una “fórmula desacreditada y agresiva que en absoluto representa un motor económico para la zona, tal y como demuestran las últimas experiencias en Canarias”.
Explica también Marrero que el PGO se basa en la idea de que la agricultura debe concentrarse casi exclusivamente en la zona alta del municipio, ignorando por completo las posibilidades agrícolas de la parte baja de Los Realejos. A cambio –señala-, “se vende la hipotética ejecución de una serie de parques, lo cual no deja de ser una pírrica compensación frente a un Plan que, en caso de llevarse a cabo por completo, duplicaría la población de Los Realejos”.
Asimismo, este PGO supone la condena del Conjunto Histórico del Realejo Bajo, en lugar de su potenciación, mientras que la ampliación del suelo industrial de La Gañanía hasta el borde de la carretera de la Cruz Santa es innecesaria y excesiva. También destacan que la urbanización del lado de Los Realejos del Parque Recreativo del Bosquito, junto a una amplia zona de la Cruz Santa hasta La Cartaya, sacrifica grandes bolsas de suelo en pro del cemento, al igual que en lado norte de la carretera general de La Gorvorana que persigue convertir la zona de El Toscal-Longuera en una suerte de macro-ciudad, explican en un comunicado desde Sí se puede.