El portavoz del comité local de Sí se puede en La Laguna, Rubens Ascanio, aseguró hoy que su formación va a tratar de que el presupuesto municipal para 2015, que se está empezando a redactar en estas semanas, incorpore una drástica reducción de alquileres innecesarios.
Para Sí se puede es injustificable el constante aumento de los alquileres municipales, que “suben por encima del precio del mercado, en unas cantidades absolutamente inasumibles en el momento actual”. A este respecto Ascanio indica que una reciente decisión de la Junta de Gobierno, del pasado julio, vuelve a aumentar el coste del alquiler que mantiene el Ayuntamiento con la entidad Depósitos Almacenes Número Uno SA, desde el año 2004, destinados a las dependencias de servicios sociales. Estos locales suponen un coste anual de 56.021,28 euros, 4668,44 euros mensuales, una cantidad que el portavoz considera que es absolutamente desproporcionada para lo que se paga actualmente por los locales comerciales en zonas similares del municipio.
La formación ecosocialista cree que es necesario que se asuma por parte del grupo de Gobierno de CC-PSOE un compromiso claro de asumir la grave situación económica por la que pasa el municipio, que actualmente tiene más de 105 millones de deuda. En este sentido, señalan que se debe hacer una apuesta por optimizar los locales municipales disponibles, aprovechando al máximo sus posibilidades para evitar pago de alquileres a entidades privadas.
La calle San Agustín un ejemplo de locales infrautilizados
Para Sí se puede el mejor ejemplo de espacios municipales infrautilizados se encuentra en la calle San Agustín. Rubens Ascanio indica que en un trayecto de pocos metros se puede encontrar el edificio ubicado junto a la plaza de la Junta Suprema, el centro municipal San Agustín, el Cabrera Pinto y el edificio que pertenecía a los Hermanos Bethlemitas, desocupados parcial o totalmente, mientras pagamos importantes alquileres. El portavoz de Sí se puede recuerda que solo el edificio ubicado junto a la antigua Iglesia de San Agustín, antigua sede de los Hermanos Bethlemitas, un edificio entregado al Ayuntamiento en febrero de 2013 y que desde entonces se mantiene cerrado, que tiene 428 metros cuadrados.
Ascanio considera incomprensible que en esta situación “se esté gastando estas cantidades u otras, como los 5.153 euros mensuales para unas naves para materiales de la Delegación de Cultura, situadas en la Carretera General del Norte, o los más de 60.000 euros anuales en las oficinas de atención e información ciudadana de la calle San Agustín”.