La organización ecosocialista destaca que el plan financiero no es solidario ni sostenible
El documento financiero se presentó a la oposición con un margen de cinco días para su estudio, lo que revela el comportamiento antidemocrático del grupo de gobierno, incapaz de enfrentarse a un análisis crítico de su propuesta para el municipio y desesperado por conseguir apoyos que legítimamente no tiene.
Sí se puede denuncia que incluso una lectura rápida revela con evidencia que “apenas el 13,71% se destina al gasto social, mientras que en otros ayuntamientos se dedica en torno al 20% a estas partidas”, detalla la portavoz de Sí se puede en la corporación del norte, Violeta Moreno.
El grupo municipal ecosocialista considera que el capítulo de Servicios Sociales debe contemplar la implantación de la renta básica para todas las personas, con la intención de garantizar el derecho a la vida, ya que “el pleno empleo es una utopía para Canarias en el marco del sistema neoliberal”, asegura Moreno. En cualquier caso, esta área tan sensible necesita algo más que fondos en Tacoronte, “es necesario un giro en la perspectiva de estas políticas, dándole prioridad a una intervención social más integral, preventiva y promocional”, destaca la portavoz.
Un estudio detallado de los 2015 y 2016 permite detectar que la mala planificación presupuestaria del grupo de gobierno municipal ha llevado a dejar de utilizar 5.423.827,11 euros, lo que ha llevado a “privar a los vecinos de gasto público”. Esta situación es la consecuencia de primar “el incremento de la tesorería municipal y de la amortización de deuda a costa de la prestación de servicios públicos, entrega de bienes públicos, generación de infraestructuras y otorgamiento de subvenciones o ayudas, con el consiguiente perjuicio ocasionado a la ciudadanía”.
Finalmente, la organización ecosocialista considera necesario aportar “mayor nivel de transparencia y control en la gestión del presupuesto municipal, tanto por parte de la oposición política como por el conjunto de la ciudadanía, a través de un proceso de presupuestos participativos”.