La Laguna trabaja para ampliar las instalaciones del Centro de Día de Personas Transeúntes ante el aumento de la demanda
Este servicio, ubicado en La Cuesta, atendió a 186 personas en situación de extrema vulnerabilidad durante 2020, periodo en el que se registró una subida del grupo de 36 a 45 años
El concejal de Bienestar Social del Ayuntamiento de La Laguna, Rubens Ascanio, ha visitado este miércoles el Centro de Día para Personas Transeúntes de La Cuesta, un servicio gestionado por Cruz Roja y cofinanciado por el Ayuntamiento, que atiende a una media de 40 personas cada día y que afronta un año complicado por las consecuencias socioeconómicas de la pandemia, marcado por las medidas para el control de los contagios y un esperado aumento del número de usuarios y usuarias, que en 2020 llegó a alcanzar a un total de 186 personas. En el encuentro, Ascanio explicó los avances con respecto al refuerzo del apoyo económico y la ampliación de este servicio, ya a su máxima capacidad, que permita responder a un aumento de la demanda de esta atención diurna y garantizando el cumplimiento de las medidas sanitarias.
“La crisis está suponiendo que los factores de exclusión social y residencial se multipliquen y que afecten con mayor intensidad en la vida de las personas más vulnerables, es decir, las que carecen de un hogar. Uno de los nuevos retos en este contexto es responder a un posible aumento de la demanda y a una mayor complejidad en los perfiles de las personas usuarias”, explica Ascanio.
En este sentido, el concejal recuerda que “estamos haciendo un esfuerzo económico público para reforzar este tipo de servicios y atender al mayor número de personas posible, no solo mediante el apoyo a los que prestan las entidades del tercer sector, como este Centro de Día, el Comedor Social o los diferentes proyectos residenciales y de atención a personas en situación de vulnerabilidad, sino también con una apuesta por recursos alojativos municipales públicos, que incluyen la apertura del nuevo RAM Clemencia Hardisson y la ampliación de las plazas en los pisos tutelados del RAMT, y por una atención integral que fomente la integración social y laboral y les permita recuperar su autonomía personal”.
Ascanio explica que “hemos aumentado los recursos alojativos de emergencia en un 250% e incrementado, lo máximo posible, la partida destinada a esta prestación asistencial para el ejercicio 2021, que casi se ha duplicado hasta superar los 2 millones de euros, así como la cuantía para alojamientos alternativos temporales y ayudas al alquiler, con más de un millón de euros, todo en un contexto de reducción de los ingresos municipales”.
Este Centro de Día de La Cuesta atiende a personas en situación de extrema vulnerabilidad y sin hogar, que se desplazan aquí para cubrir sus necesidades más básicas de alimentación e higiene y para las que constituye un punto de referencia al que acudir ante cualquier circunstancia. Con este proyecto, además, se busca la inserción social y el aumento de la calidad de vida de estas personas, así como frenar el alto riesgo de exclusión social en el que se encuentran, mediante el fomento de las habilidades para su integración social y laboral y su derivación a otros recursos si fuera necesario.
En la actualidad, recibe a una media de 40 personas al día, a las que ofrece servicios de aseo personal, lavandería, entrega de ropa, consigna, desayuno y asesoramiento social. También organiza talleres relacionados con el desarrollo de las habilidades sociales y la promoción personal, hábitos de vida saludable, búsqueda de empleo, resolución de conflictos, etc.
El año pasado, atendió a 186 personas, de las que 127 fueron hombres (el 68%) y 59, mujeres, grupo de población que está creciendo en el uso de este tipo de recursos. En cuanto a los rangos de edad, el grupo de personas de 36 a 55 años ha sido el mayoritario, representando el 57% del total. Cruz Roja destaca que, aunque en 2019 predominaba el rango de 46 a 55, en 2020 fue ligeramente superado por el de 36 a 45 (32% del total). Un 5% de las personas atendidas durante 2020 tenían entre 18 y 25 años, porcentaje que sube al 9% para las personas de 26 a 35 años de edad.
El Centro, en datos
Entre sus servicios, se incluyen el de aseo (duchas y elementos de higiene personal), lavandería (lavado y secado de ropa con los productos necesarios) y desayunos. En este apartado, en 2020 se realizaron un total de 7.737 asistencias y se hizo entrega de 2.532 packs de desayuno. Las limitaciones de aforo y las medidas de control sanitario han supuesto un incremento de los costes y han afectado a la prestación del servicio de desayunos, con lo que se ha tenido que optar por complementarla con estos kits individuales ya preparados.
También cuenta con un servicio de ropero, con enseres donados al centro por particulares y empresas, con el que se ha repartido ropa y enseres a 93 solicitantes, con 336 entregas en 2020. Además, cuenta con 26 taquillas individuales para personas que lo soliciten, lo que les permite disponer de un lugar seguro para guardar sus pertenencias. 30 personas solicitaron ese servicio durante el año pasado.
En este Centro también se canalizan las demandas hacia recursos especializados, siempre de manera consensuada con las personas usuarias. Así, durante 2020, se realizaron 37 intervenciones con 33 personas y se acompañó a otros recursos a un total de 7.
Además, se realizan talleres dirigidos a propiciar su autonomía personal, tanto para fomentar hábitos de vida saludable como de diversos conocimientos en virtud de su integración sociolaboral, con 11 sesiones a lo largo del año, y se establece un itinerario personalizado de inserción social de manera conjunta con las personas usuarias. En este sentido, se han realizado 153 intervenciones de seguimiento con 72 personas, que se han completado con 60 atenciones de gestión y atención básica a 48 personas.
Cruz Roja gestiona este servicio, financiado con fondos propios y con una subvención del Ayuntamiento de 14.000 euros, que representa algo más del 40% del presupuesto total del centro. Cuenta con una trabajadora social y una quincena de personas voluntarias.
Nuevos perfiles
Según diversos estudios de entidades que trabajan con el colectivo de personas sin hogar, se constata que, desde la aparición de la COVID-19, se visibilizan diferentes realidades de exclusión residencial. Así han llegado a encontrarse en situación de calle, de manera repentina y sin poder acceder a otro tipo de ayudas públicas, mujeres que ejercían de cuidadoras, empleadas de hogar o internas que han perdido su puesto de trabajo o incluso su alojamiento; personas que desarrollaban actividades de economía sumergida y que, con el confinamiento, han perdido sus ingresos y alojamiento, por ejemplo, mujeres que ejercían la prostitución y que han sido expulsadas de los clubes o pisos en los que se alojaban, además de personas sin contrato de arrendamiento o en condiciones de hacinamiento, que se alojaban en pensiones u hostales que han cerrado con la aparición de la pandemia, entre otras.
Estas situaciones se suman a las ya existentes de grave exclusión y, aunque no todas terminan requiriendo atención desde los recursos específicos para personas sin hogar, sí que se han comenzado a visibilizar en diversos proyectos de apoyo a las personas en situación de vulnerabilidad, como destaca el concejal de Bienestar Social.
Recursos alojativos municipales
Además de las 30 plazas del Recurso Alojativo Municipal (RAM) Clemencia Hardisson y de las 31 distribuidas en viviendas tuteladas para familias, mujeres y hombres del Recurso Alojativo Municipal Temporal (RAMT), Bienestar Social de La Laguna ofrece alojamientos alternativos mediante estancias temporales en pensiones u hostales y ayudas al alquiler, con una inversión que supera el millón de euros. Las Unidades de Trabajo Social se encargan de la valoración de cada caso y de asignar el recurso o ayuda más apropiado.
Asimismo, el Área apoya con financiación municipal a otras iniciativas del tercer sector en el municipio, en las que se incluyen el Hogar Lázaro de Cáritas, que acoge a 12 personas; el Hogar de los Hermanos de Belén para hombres en situación de exclusión social a partir de 55 años, con 30 plazas residenciales, y el Centro de Día de Cruz Roja para personas transeúntes, ubicado en La Cuesta y que atiende a 66 personas en situación de extrema vulnerabilidad.