Evasión RIC. Paco Déniz

Las noticias referidas a la RIC siempre esconden un porcentaje elevado de su verdad. Nunca se ha dicho claramente en qué se gastaron el dinero de la RIC los empresarios que se acogieron a ella, y se dice de tal manera que no termina siendo de domino público. Ahí está la cuestión, que no es de dominio público, no está en el debate de la calle, no ocupa portadas de manera sistemática, es un debate que no cala en el itinerario barítimo. La RIC es un secreto escondido, y es un secreto porque no interesa que salga a la luz pública. Algo tendrá de ilícito.

Si fuera de dominio público que la mayoría de empresarios que se acogen a la RIC no sólo no pagan impuestos (un ínfimo mínimo) sino que, además, son los responsables de haber llenado Canarias de cemento y de construcciones vacías, igual la gente comenzaría a dudar. Si fuera de domino público que ese privilegio fiscal se hizo supuestamente para generar empleo y muchos se lo gastaron en lujos personales con factura de la empresa, la gente se mosquearía, pero si la gente supiera que, encima, los dirigentes empresariales pretenden, ahora, llevarse el dinero para invertirlo fuera de Canarias, entonces hablarían de evasión fiscal.

Si fuera de dominio público que el gobierno autónomo oculta información de sus actividades en Bruselas para facilitar la evasión legal de este capital acumulado tendría la gente un motivo genuino para la sublevación, pero nada de esto es de domino público. Sí, se informa por fascículos, pero no aparece nunca en un tomo vergonzoso del fraude a hacienda. Porque si la gente supiera que todo el peso del Estado social cae sobre sus maltrechas clases medias y su depauperada clase obrera, y que las instituciones no nos defienden del acoso de los bancos y de las complementarias de Hacienda,… entonces, a lo mejor,… no me imagino lo que pasaría. Igual no pasa nada pero, por si acaso, ya preparan una Ley para multarnos.

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