El Cabildo de Tenerife paraliza las obras en la carretera TF-21 tras la denuncia de Asamblea por La Orotava sobre incumplimiento de acuerdos en materia de arbolado
La confluencia municipalista advirtió al gobierno de CC-PNC que parte de las actuaciones no cumplían con los acuerdos alcanzados en el pleno insular
El Cabildo de Tenerife paraliza las obras en la carretera TF-21, tras la denuncia Asamblea por La Orotava, en la que advirtió al gobierno de CC-PNC en sus redes sociales que parte de las actuaciones no cumplían con los acuerdos alcanzados en el pleno insular al aprobarse una moción de la coalición Sí Podemos Canarias relativa a la forma de actuar que corresponde a esta área de la corporación insular en el caso de encontrarse con árboles que podrían verse afectados a raíz de sus intervenciones. De esta manera, las obras, que se preveía comenzar este lunes, 31 de enero, han quedado paralizadas en la carretera que une La Orotava con Santa Úrsula.
La confluencia municipalista Asamblea por La Orotava, que cuenta con dos ediles en el ayuntamiento, destacó en su advertencia que el acuerdo alcanzado en el pleno del Cabildo de Tenerife a raíz de la aprobación de la moción de la coalición formada por Equo, Sí se puede y Podemos establece que toda acción que afecte al arbolado urbano de Tenerife debe pasar por la mesa insular de protección del arbolado. Efectivamente, en el kilómetro 1.8 de la TF-21 estaba prevista una actuación que conlleva la eliminación de una veintena de árboles.
Esta intervención de acondicionamiento y creación de un arcén va unida a la propuesta del Partido Popular para la creación de un carril bici desde el mirador de Humboldt hasta la entrada de La Orotava. Esta propuesta fue aprobada con la enmienda de la coalición mencionada para asegurar que ningún árbol que se encontraba en ese tramo sufriera daños o fuera eliminado.
Ante las reivindicaciones de Asamblea por La Orotava para dar cumplimiento a los acuerdos alcanzados en el Cabildo, el concejal de Ubanismo del Ayuntamiento de La Orotava, Narciso Pérez (CC-PNC), se reunió en la mañana del viernes 28 de forma urgente con el Cabildo de Tenerife y en esta reunión se decidió retrasar el inicio de las obras, que tenían contemplado comenzar el lunes 31 de enero desde Santa Úrsula, para comprobar si la actuación cumple o no con los acuerdos alcanzados en el Cabildo.
Una araucaria amenazada
Dentro de las actuaciones mencionadas también está previsto la creación de un pequeño tramo de acera en una zona del Paseo Domínguez Afonso de La Orotava, a la altura del campo de fútbol del Quiquirá. Vecinos de la zona advirtieron que se habían marcado las simbólicas araucarias, lo que hacía pensar que todas serían eliminadas. Asamblea por La Orotava aclaró que solo uno de los ejemplares iba a ser eliminado por el Cabildo por el potencial peligro de causar daños materiales en las viviendas colindantes. La confluencia municipalista recuerda que, en caso de suponer un potencial peligro de daños personales o materiales, la tala de árboles debe ser la última opción y deben primero contemplarse otras alternativas.
Según Asamblea por La Orotava, el concejal de Urbanismo ha asegurado que este ejemplar de araucaria no será eliminado por el Cabildo, a la espera de que un informe técnico certifique que la tala es la única opción para evitar daños en las viviendas cercanas.
A juicio de la Asamblea, el mal estado de esta araucaria es un síntoma de la nula gestión del arbolado urbano del municipio por parte del gobierno de CC durante los 40 años de mandato.
La confluencia municipalista reivindicala incorporación de medidas saludables y sostenibles en el mantenimiento de parques, jardines y zonas verdes del municipio, así como garantizar el respeto a las normas de tecnológicas de jardinería y paisajismo (NTJP) contempladas en el pliego de prescripciones técnicas del contrato entre el Ayuntamiento y las empresas que prestan servicios; también apuestan por la elaboración de un plan de gestión del arbolado por profesionales de la arboricultura y de un plan director del arbolado urbano; la supresión del desmochado, el descabezado y el falso terciado de los árboles y la atención a cada árbol en función de sus características y necesidades y la elaboración de un catálogo de árboles de interés locales, así como una normativa para su protección.