Bienestar Social de La Laguna y Acufade impulsan un proyecto para mejorar la calidad de vida de las personas cuidadoras
El Área trabaja en nuevas políticas públicas de cuidados para las vecinas y vecinos en situación de dependencia y los retos de una sociedad que tiende al envejecimiento
El Área de Bienestar Social del Ayuntamiento de La Laguna y la Asociación de personas Cuidadoras, Familiares y Amigos/as de Personas con Dependencia, Alzhéimer y otras Demencias (Acufade) impulsan el primer proyecto para mejorar la calidad de vida de las personas que cuidan en el municipio, una iniciativa que promoverá actividades grupales e individuales para decenas de personas durante un año.
El concejal de Bienestar Social, Rubens Ascanio, explica que “estamos trabajando en nuevas políticas públicas de cuidados para garantizar que las personas mayores y en situación de dependencia puedan vivir con autonomía el mayor tiempo posible, pero también, para dar valor a los cuidados como un trabajo indispensable para la sostenibilidad de la vida, priorizando su universalidad, calidad y condiciones laborales dignas”.
El envejecimiento poblacional, la sobrecarga del sistema sanitario por la atención a la cronicidad, el impacto negativo de género que puede tener una visión familiarista de los cuidados y la necesidad de crear dispositivos ágiles y flexibles que respondan verdaderamente a las necesidades de cada persona, son desafíos de calado estratégico que ya está analizando el Área.
La iniciativa de Acufade “De una cultura de curar a una cultura de cuidar” tiene, como objetivos fundamentales, crear y ofrecer espacios de formación en materia de cuidados ajustados a las necesidades del colectivo, promover el autocuidado y la autoestima, facilitar y promover el disfrute de las prestaciones y servicios a los que puedan tener derecho, tanto las personas cuidadoras laguneras como las personas en situación de dependencia a las que cuidan, así como favorecer la participación y corresponsabilidad del conjunto familiar en la atención y cuidado de las personas en situación de dependencia.
El Área financiará con 24.800 euros la casi totalidad del coste de este proyecto, que tiene un año de duración. Esta iniciativa se suma al proyecto La Laguna Cuida, una iniciativa que permitió la contratación de 40 personas con titulación superior y en desempleo de larga duración para hacer una investigación pionera y pormenorizada, a escala municipal, de la soledad no deseada entre las personas mayores y la realidad del colectivo de cuidadoras y cuidadores informales.
Los resultados de La Laguna Cuida permitirán desarrollar una estrategia municipal de cuidados y contra la soledad no deseada, una intervención que Ascanio califica de “urgente, de ahí la importancia de la iniciativa de Acufade en esta materia y que cuente con nuestro total apoyo”. Todas estas acciones, “más las que están por venir, nos permitirán poder contar con personal formado y cualificado, diagnosticar y atender mejor sus necesidades, pero también estar preparados para la nueva estrategia en materia de cuidados que se va a desarrollar en los próximos años en el Archipiélago”
El 75% son mujeres
En este sentido, el concejal explica que “en La Laguna, tenemos 3.000 personas con informes sociales de dependencia elaborados por el Área de Bienestar Social, 4.000 personas en situación de soledad no deseada y sabemos que el 75% de las personas que prestan cuidados familiares son mujeres, tanto hijas como parejas”. A esto se suma que en el municipio viven más de 17.000 personas con discapacidad, con diversas realidades que atañen directamente a sus familias, y más de 38.000 personas que superan los 60 años de edad, con una tendencia clara al envejecimiento poblacional y, por tanto, a que ambas cifras continúen aumentando.
En cuanto a la atención asistencial, el concejal de Bienestar Social explica que “estamos trabajando para implantar progresivamente, teniendo en cuenta la situación de partida, un modelo de centros que apoye a las familias que no pueden asumir los cuidados de las personas dependientes, que contribuya a mejorar la calidad de vida de las personas mayores, promueva su autonomía y les permita, siempre que sea posible, poder continuar su vida en su hogar y su barrio”.
“Esta es una actuación fundamental porque la demora en el acceso a estos servicios supone gravísimos trastornos para la salud de estas personas mayores e importantísimas sobrecargas familiares, especialmente para las mujeres”.