Euros y tanatos. Pedro Fernández Arcila
Les relato algunas aplicaciones prácticas de este revival psicoanalítico en versión atica. En 2004 el anterior alcalde santacrucero le entregó gratuitamente a aquella multinacional la explotación del Tanatorio de Santa Lastenia durante setenta y cinco años, es decir hasta finales del presente siglo XXI. Sí, leyeron bien, le cedimos gratuitamente a una multinacional suelo municipal hasta casi el final de los tiempos para que explotara su tanatorio privado. Bermúdez, el actual alcalde, sigue sin revisar estas condiciones y en estos cuatro años no le ha reclamado un solo euro por el que resulta ser, nadie lo duda, uno de los negocios más rentables y seguros de nuestra ciudad. Varios años después el anterior alcalde, contraviniendo un informe de los técnicos municipales, había modificado las ordenanzas fiscales para que la multinacional de marras cobrara a todos los santacruceros lo que le viniera en gana.
Con este cambio en las ordenanzas la multinacional reclamo al Ayuntamiento cantidades millonarias. Al final aquel informe municipal no se acompañó al expediente del juzgado donde, por el contrario, si figuraba un acuerdo plenario en el que los concejales de aquella época reconocían como angelitos hasta el último euro que había reclamado extrajudicialmente la empresa. Hasta el momento, por esta bula municipal, le hemos pagado los contribuyente santacruceros seis millones setecientos mil euros, es decir más de mil cien millones de las antiguas pesetas, o lo que es lo mismo más de la mitad del presupuesto anual del Instituto Municipal de Atención Social. En fechas recientes el actual concejal responsable del área, Dámaso Arteaga, reconocía a los medios de comunicación que estaba dispuesto a reconocerle extrajudicialmente a la multinacional otros seiscientos mil euros más. Le pedimos al susodicho concejal que compareciera ante la Comisión de Control para que explicara estas afirmaciones que había recogido un periódico local. El concejal del Gobierno mató al mensajero, y anuncio que realmente los seiscientos mil euros lo pagarán los ciudadanos que tienen familiares en el cementerio y no el Ayuntamiento. Estén seguros que tratarán de ocultar esta obligación que le endosan a los vecinos hasta las elecciones locales, nos seguirán mintiendo y sólo le contarán la verdad a la multinacional con quien mantienen esta relación ?eurotica?. Por eso estoy convencido que nuestro deber es desenmascarar este idilio y contar cada vez con más chicharreros que, por asuntos como este, se convenzan de la necesidad de que comprarle a estos políticos un ticket en la barca de Caronte con parada final en el camposanto de los dinosaurios.
*CONCEJAL DE SI SE PUEDE EN EL AYUNTAMIENTO DE SANTA CRUZ