Antonio González: “Esperábamos subir, pero no ser la fuerza más votada por tanta diferencia”.
No obstante, no se le presenta un camino fácil, dado que alcanzar su objetivo, el de gobernar en minoría, no resulta fácil, aunque considera que es una responsabilidad que tiene el resto de fuerzas políticas el saber entender los resultados electorales. En su opinión, y pese a los riesgos que conlleva, esta opción abriría importantes vías de diálogo y convertiría al Pleno, actualmente “muy debilitado”, en lo que realmente debe ser, un órgano de de debate y de control del grupo de gobierno. Pero también pretende establecer consejos sectoriales de barrios y unos presupuestos participativos.
– ¿Esperaba el resultado electoral conseguido el 22 de mayo?
“Esperábamos subir y tener buenos resultados, pero no ser la fuerza más votada por tanta diferencia. Son más de 400 votos con el PSOE, que lleva gobernando más de siete mandatos y eso sí que fue una sorpresa”.
– ¿A qué cree que se debe, a que Sí se puede hizo una buena oposición durante los últimos cuatro años, o a que el pueblo buscaba una opción distinta de gobierno?
“Pienso que fue un poco de las dos cosas. Por una parte, los vecinos demandaban un cambio, y así nos lo decían. Por otra, la labor de oposición desarrollada hicieron creíble nuestra opción de cambio. De todas las que se presentaron, la de Sí se puede es la más destacada. También tenemos una diferencia bastante grande con Coalición Canaria (CC), que lleva 16 años haciendo oposición y con las que han hecho otras fuerzas políticas”.
– ¿En qué reside la diferencia?
“Principalmente en la cercanía con los vecinos y en la celebración de asambleas. Durante estos cuatro años hemos celebrado más de 24 en los diferentes barrios de Buenavista, Las Portelas, Masca, El Palmar y en el casco. También hemos presentado más de 120 mociones al Pleno y utilizado las redes sociales para acercar nuestro trabajo, pero no de una manera artificial, sino de nuestros propios perfiles. Ha sido una mezcla de todo lo que ha hecho más creíble el contacto con la ciudadanía”.
– Sin embargo, todo indica un pacto con CC, ¿eso es cierto?
“Todavía no hay nada cerrado. Hemos entablado conversaciones con todas las fuerzas políticas, con CC porque hemos compartido oposición durante este mandato, la cercanía es muy buena y hemos pensado que podría ser un apoyo importante a la hora de formar gobierno. Pero también lo hemos hecho con el PSC-PSOE y el Centro Canario Nacionalista (CCN). Sólo se han realizado las primeras tomas de contacto, todo dependerá de la Asamblea que celebrará nuestra formación la próxima semana. El partido respeta las decisiones de los comités locales, pero es la Asamblea la que se encarga de aprobarlas”.
– Pero aunque a nivel municipal Sí se puede tenga buena sintonía con los nacionalistas, su ideología se acerca más al PSC-PSOE ¿Se trata de quitar a este partido del gobierno después de 28 años?
“La gestión que han hecho los socialistas se aleja bastante de la de cualquier partido que se pueda llamar progresista. Estos últimos 12 años han llevado al municipio a un estado de deuda tan grande que no se sostiene en ningún manual de política progresista. A pesar de que ideológicamente somos dos partidos diferentes e incluso muy separados, ha habido bastante sintonía con CC respecto al trabajo realizado y eso es lo que le importa a los vecinos. Sin embargo, es cierto que ha sido distinta la forma de hacerlo, ellos no han celebrado asambleas y nosotros sí porque entendemos que es necesario la transparencia, la cercanía, y la implicación de los vecinos en la gestión”.
– ¿Y no se atreven a gobernar en minoría?
“Era nuestra propuesta inicial y lo que queremos. Pero el PSOE, por ejemplo, lanza mensajes contradictorios, por un lado habla de apoyarnos y por otro, de mociones de censura. Nosotros no tenemos ningún miedo a hacerlo porque creemos que con transparencia y buena gestión podríamos lograrlo. Entendemos que el cambio que ha encomendado la ciudadanía lo tiene que liderar Sí se puede, pero también que hay que hablar con el resto de fuerzas para poder hacerlo con una estabilidad importante”.
-Y en caso de hacerlo finalmente, ¿cuáles serán las primeras medidas que se pondrán en marcha?
“En primer lugar, las referidas al ahorro, en cuanto a la factura de altos cargos. Vamos a reducir una concejalía liberada, el sueldo del alcalde bajará un 40% y el de los concejales, un 30%. Eso propiciará un ahorro de más de 78.000 euros anuales. Hay que aprobar las cuentas de 2001 y, por lo tanto, hay que ponerse inmediatamente manos a la obra y el resto del año, hacerlo lo más planificado posible. También hay que programar nuevas áreas, como la de Bienestar Social, donde hay que dar un paso adelante en su modernización, gestionar mediante una ordenanza las ayudas que ahora mismo se tramitan por emergencia social. Digamos que esto será el principio del camino. Ahora mismo, se necesitan crear ingresos debido a la deuda que tiene el Ayuntamiento, que es el tercero más endeudado por habitante de Canarias. Hay que rebajarla, igual que la factura que tiene con los bancos, que asciende a más de 580.000 euros, una cantidad que supone un 10% del presupuesto de 2010”.
Fuente: Diario de Avisos