Sí se puede presenta nuevas alegaciones sobre el pozo de Las Gavias y en favor de la desalación
El comité local de Sí se puede en La Laguna presentó este lunes nuevas alegaciones, conforme a lo previsto en el artículo 96 del Decreto 86/2002, por el que se aprueba el reglamento del Dominio Público Hidráulico de Canarias, a la propuesta de resolución del 1 de julio de 2014 que formula el Consejo Insular de Aguas de Tenerife (CIATF) sobre la solicitud de concesión de un pozo-sondeo para Las Gavias.
El portavoz del comité, Rubens Ascanio, explica que el CIATF les ha dado diez días hábiles para responder a la propuesta de resolución emitidas ante las alegaciones presentadas por su formación el pasado mes de diciembre referidas al trámite de exposición pública realizado para ese expediente. En esta resolución se reconoce parcialmente la pertinencia de algunas de las cuestiones planteadas por la organización ecosocialista sobre el riesgo que puede suponer esta obra para las aguas subterráneas y la escasa duración de las mismas. A este respecto destacan que de los 75 años de concesión solicitados inicialmente solo se conceden 20 años y además del potencial máximo anunciado por el Ayuntamiento, calculado en 40 litros por segundo, se dice que nunca podrán superar los 19,93 litros por segundo, no pudiéndose alcanzar en ningún día del año los 1.713,98 metros cúbicos. Ascanio recuerda que solo en el proyecto de desaladora previsto en el 2009 para Valle Guerra, que se contemplaba en los documentos del Cabildo desde 2001 como una obra fundamental para garantizar el abastecimiento y el suministro de agua para uso urbano, agrícola y turístico en La Laguna, se hablaba de una producción diaria que podría llegar a los 10.000 metros cúbicos. “Incluso si se aumentara la producción de la desaladora existente en la actualidad en la Dársena de Santa Cruz, podríamos alcanzar sin mucho problema esta cantidad, con un coste bastante reducido, como se puede ver en nuestra respuesta al CIATF”, afirma.
En Sí se puede indican que el escrito del CIATF también reconoce la escasa vida útil de esta pozo, que en la página 21 del informe se cuantifica en un máximo de 20 años, sin tener en cuenta el efecto de los otros pozos cercanos sobre el acuífero, incorporándose para ello varios estudios relativos a este problema que fueron mencionados en la alegación de la fuerza ecosocialista lagunera.
Rubens Ascanio explica que en la elaboración de esta respuesta han contado con la colaboración de Julio Muñiz Padilla, químico, catedrático de Física y Química, jefe del departamento de Química Ambiental que se imparte en el IES de Tegueste, profesor del módulo profesional de depuración y tratamiento de aguas, y Organización de la Seguridad y Gestión Ambientales, en relación a las extracciones de aguas mediante pozo de profundidad en la zona de Anaga-La Laguna. Las conclusiones de este informe insisten en que la extracción de aguas subterráneas, especialmente mediante pozos verticales, no resuelve en absoluto el problema de la calidad y de la cantidad de aguas para el uso humano en el municipio de San Cristóbal de La Laguna, u otros de la isla situado en las medianías, sino, que, todo lo contrario, perjudica de manera irreversible el estado de los bosques de niebla que, en particular en los meses de verano, constituyen las mejores fuentes de agua con que contamos los isleños de las islas occidentales.
Igualmente mantienen su clara apuesta por la desalación, asegurando que la mejor calidad de agua que actualmente se puede consumir en Tenerife proviene del mar mediante esta técnica “por ósmosis inversa, con membranas nuevas de poliamida , lo que garantiza el cumplimiento de todos los aspectos legislativos que emanan del RD 140/2003 y que está acorde con las recomendaciones de la Organización Mundial para la Salud”.
El portavoz de la formación de izquierdas indica que esta alegación pretende “que no nos volvamos a gastar otros 1,4 millones de euros en un pozo y unas canalizaciones que simplemente resolverán parte del problema durante unos años, mientras se deja sin resolver el la situación de fondo y se pone en riesgo el entorno natural de Anaga”. Ascanio espera que nuevamente las reclamaciones de su formación sean atendidas y estudiadas, echando en falta una auténtica política sobre el agua pública en La Laguna, “que debe ir mucho más allá de los parches temporales o mantener el negocio de cuatro aguatenientes”.