Sí se puede afirma que se están gastando más de 220.000 euros anuales en alquileres municipales innecesarios en La Laguna
Juan Miguel Mena, concejal de Sí se puede en La Laguna, ha criticado este viernes la inactividad municipal en la reducción de los costes de los alquileres municipales, una de las medidas aprobadas en el Plan de Ajuste aprobado por CC-PSOE en abril de 2012.
A día de hoy, según el portavoz de izquierdas, “a pesar de las iniciativas que hemos presentado desde la oposición y las alternativas presentadas, se mantiene un importante coste en unas partidas difíciles de explicar cuando tenemos numerosos edificios municipales sin uso”. El edil critica que no solo no se hace nada por recortar en estas partidas, por el contrario, en la Junta de Gobierno del pasado 3 de septiembre se volvió a subir la renta de los alquileres que se pagan para ubicar la sede de los Servicios Sociales laguneros un 1,4%, pasando de 138.527,52 euros a los 140.466, 96 euros anuales, lo mismo sucede con los locales usados para el Servicio de Atención Ciudadana, que aumenta un 2.9%, más de 2.200 euros anuales.
Mena cree que mientras que se pide contención a los alquileres sociales el Ayuntamiento parece negarse a negociar los alquileres de los locales municipales a la baja, para que se correspondan realmente con la situación real que vive el mercado inmobiliario local.
Una alternativa viable a pocos metros
El portavoz de Sí se puede recuerda que junto a la antigua Iglesia de San Agustín se encuentra la antigua sede de los Hermanos Bethlemitas, un edificio entregado al Ayuntamiento en febrero de este año, con 428 metros cuadrados y que actualmente se encuentra vacío.
Existía un proyecto de convertir este espacio y la antigua Iglesia en un centro de congresos y espacio cultural, proyecto que ha quedado parado por la crisis. Mena propone que las dependencias del SAC y de los Servicios Sociales sean trasladadas a este edificio, que se encuentra en buen estado y bien ubicado, lo que generaría un ahorro anual de más de 220.000 euros para el municipio.
“Si el gobierno local tiene un compromiso real con una mejor gestión de los recursos públicos y el ahorro en partidas superfluas pienso que deberían tomar muy en serio esta alternativa, que seguramente requerirá una inversión relativamente pequeña en comparación con el ahorro generado”, finaliza