Sí se puede denuncia que el Ayuntamiento de Tegueste sube las tarifas del agua para que los vecinos paguen su errónea gestión con Aqualia

 

Sí se puede denuncia que, con la subida del precio del agua en Tegueste, el ayuntamiento obliga a los vecinos y vecinas a pagar los errores de la gestión del Ayuntamiento en su relación con la empresa concesionaria del servicio público de aguas, Aqualia. El grupo de gobierno justifica la subida del precio del agua en el municipio metropolitano en los más de 400.000 euros que debe desembolsar la corporación a la empresa, en cumplimiento de varias sentencias judiciales.

Aqualia reclama al Ayuntamiento de Tegueste indemnizaciones en concepto de déficit tarifario, y varias sentencias emitidas por los tribunales de justicia dan la razón a la empresa concesionaria. Por este motivo, el Ayuntamiento está obligado a pagar las cantidades de 164.958 €, 148.372 € y 98.789 €, correspondientes a los años 2009, 2010 y 2011 respectivamente. A estas cantidades ha de sumarse los intereses de demora impuestos por un importe de 93.000 €.

La subida de la tarifa del agua se justifica entonces con la intención supuesta de compensar estos desembolsos que han tenido que hacer y conseguir el equilibrio financiero ante “un desequilibrio existente que es supuesto”, explica Sergio Fernández, concejal de Sí se puede en el Ayuntamiento de Tegueste.

La organización ecosocialista cuestiona este desequilibrio porque le consta que “en Tegueste se pierde por fugas y deficiencias de la red de distribución un 25% del agua potable, según los datos que hemos observado tras analizar las memorias descriptivas de las cuentas de explotación de los últimos años presentadas por Aqualia”, señala Fernández.

“Es intolerable ese porcentaje de pérdidas y que solo se invierta un 1,34% en reparaciones”, subraya el concejal, quien destaca que “extrañas coincidencias y duplicidades ponen en entredicho la fiabilidad de estas memorias económicas”.

Por este motivo, Sí se puede cree que “es necesario investigar y aclarar qué está pasando realmente en esta concesión y el ayuntamiento ni lo hace ni facilita que otros lo hagamos, como ha intentado nuestros concejales en varias ocasiones”, apunta el portavoz ecosocialista.

Para mejorar la transparencia en la gestión y conocer los hechos reales, Sí se puede ha promovido distintas acciones en el pleno que no han tenido respuesta. Así, el concejal ha pedido las facturas que respalden la compra de agua y todas las memorias económicas desde el año 1991 para que estudiar el comportamiento de la concesión desde su inicio; los datos no se han entregado.

Igualmente, Sí se puede solicitó todas las actas de las reuniones que se hayan realizado por parte de la Comisión de Seguimiento del servicio, que, según el alcalde se celebran una o dos cada año. Sin embargo, el ayuntamiento solo ha entregado a la organización ecosocialista tres actas, correspondientes a 2012, 2013 y 2014. Solo desde el año 2007, periodo que coincide con el inicio del mandato del actual alcalde y también periodo en el que comienzan las reclamaciones de desequilibrios económicos, debería haber del orden de 8 a 16 actas, subraya Fernández.

Finalmente, la organización ecosocialista ha propuesto que todos los grupos con representación en el Pleno formen parte de la Comisión de Seguimiento y Control del servicio. El grupo de gobierno se negó argumentando que no tiene sentido la solicitud por tratarse de comisiones técnicas y no políticas.

“Evidentemente, para Sí se puede está claro que lo que no quieren es que nadie sea testigo del abandono en sus funciones fiscalizadoras característico de esta concesión y las consecuencias que ha tenido y seguirá teniendo”, manifiesta el concejal. “Quieren tapar y ocultar para que todo quede en casa y controlar la información”, concluye.

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