Sí se puede pide que se alcance un consenso con el nuevo reglamento de centros ciudadanos antes de llevarlo al Pleno
El concejal de Sí se puede en La Laguna, Juan Miguel Mena, cree que el nuevo Reglamento Regulador del Uso y Gestión de los Centros Ciudadanos Municipales, que se quiere votar en el próximo Pleno municipal, debería ser objeto de un debate más amplio que permita alcanzar un mayor apoyo de las asociaciones vecinales y colectivos del municipio, ante el rechazo que han hecho público más de 30 asociaciones vecinales en la reciente asamblea informativa celebrada para abordar este documento.
Mena cree que la respuesta de las asociaciones de vecinos debe ser atendida y establecer un último esfuerzo para alcanzar unos acuerdos que hagan que este reglamento sea un éxito y “no otro documento aprobado que se guarda en una gaveta como el de playas y piscinas”.
“Hay dudas razonables con respecto a los planteamientos de este reglamento referidas a temas como las portavocías de estos centros, al ser designados directamente por la Concejalía de Participación, en vez de votadas entre los integrantes del centro o incluso el conjunto de los vecinos”, explica el edil.
La formación ecosocialista también cree que se está generando un importante debate con el futuro de las cantinas existentes en este tipo de centros, que se quieren cambiar por una concesión de máquinas expendedoras. Comparten la necesidad de regular este asunto e indican que el 22 de mayo de 2013 reclamaron los informes y expedientes municipales existentes sobre este tipo de instalaciones, sin que hasta el momento hayan recibido ninguna respuesta oficial. A este respecto Mena cree que se podrían buscar fórmulas para legalizar estas actividades, “siguiendo el ejemplo de las cafeterías ubicadas en otros edificios públicos, estableciendo un sistema de concurso público donde cualquiera pueda participar en igualdad de condiciones”.
El edil de izquierdas cree que lo más conveniente es que este reglamento, que se anunció que sería aprobado desde finales de 2010, incorpore las aportaciones de las asociaciones y los colectivos que deseen mejorarlo, para ser aprobado definitivamente antes de finales del presente año. A pesar de ello indican que también realizarán sus propias aportaciones al documento, mediante las alegaciones correspondientes, para fomentar un uso abierto y plural de los mismos, ya que creen que “en los últimos años se ha restringido el acceso de estos espacios públicos a los ediles de la oposición y otras organizaciones críticas, que han sido directamente vetadas para poder realizar labores informativas”.